Un temblor

Iba yo a contestar el meme de Leonor y a colgar la canción que mi hermano me ha hecho para la banda sonora de la telenovela que están haciendo mis alumnos cuando la silla se ha sacudido (y yo con ella).

¿Un terremoto? En primicia… La calle está tranquila. Sólo algunos vecinos se han asomado a la ventana. No se ha ido la luz, no ha saltado ninguna alarma… A ver si mañana alguien nos lo confirma, que no son horas.

Lo malo de los terremotos es que nunca se sabe si cuando acaba el temblor ya está o habrá luego más. Nos hemos acordado del terremoto que vivimos en Bucarest hace unos años, en el que la casa se movió como un flan. M estaba hablando con su hermano por teléfono y tuvo la sangre fría de decirle: mira, tengo que colgar, que hay un terremoto, luego hablamos, después me protegió bajo el ala, agarró con la otra mano una botella de agua y nos colocó bajo un dintel. Eso sí que es velocidad de reacción. Yo estaba histérica. Nuestra vecina de entonces se acordó del terremoto del 77, que destruyó gran parte de la ciudad y se echó a la calle. Su marido (que en gloria esté, pero eso es otra historia) se quedó tranquilamente fumando en casa.

Madre mía, qué aventuras…

Anuncio publicitario